El equipo inglés eliminó de la 'Champions' al Sevilla con goles de Albrighton y Morgan anotaron
El Sevilla pendía de un hilo por el gol agónico que alcanzó a recibir en la ida de su llave contra Leicester, que hizo lo que tenía que hacer: 2-0 en su estadio y a cuartos de final.La tensión con la que terminó el partido de ida no disminuyó en la vuelta. Se sabía que un solo gol del Leicester pondría las cosas a su favor, y con su buena racha el equipo español no quería arriesgarse.
Sin embargo, en un tiro de esquina a los 26 minutos del primer tiempo llegó la apertura del marcador por medio de un cabezazo libre en el área del capitán Wes Morgan. Nadie se pudo oponer a su corpulencia y tampoco a su gran remate desde las alturas que puso el 1-0 para los locales, que de momento les daba la clasificación.
Para el complemento, los dirigidos por Jorge Sampaoli trataron de construir con más precisión el juego. Para ello retrocedió a uno de sus talentos, como Samir Nasri, pero regaló espacios arriba. Aunque mantenía acorralados a los ingleses, se volvía predecible buscando a Wissam Ben Yedder por derecha y haciendo hipnótica la circulación del balón.
Sergio Escudero quiso romper esto a los siete del complemento pero estrelló el balón en el palo. Los azules se despertaron y despegaron consiguiendo el 2-0 dos minutos después, cuando un pésimo despeje hacia el centro le quedó con arco claro a Marc Albrighton para que anotara raso, cera al palo de su derecha.
Rozando el cuarto de hora antes del final, Nasri terminó expulsado tras ser provocado por Vardy, que terminó con tarjeta amarilla por ello. Sin embargo, cuando más mal se veía el tema, el árbitro Daniele Orsato pitó un penal dudosísimo al que el portero Kasper Schmeichel le hizo justicia atajando abajo a su izquierda el remate de Steven N’Zonzi.
El partido terminó como podría esperarse: el técnico argentino expulsado y su equipo arriba buscando por todos los medios un empate que enviara la serie a penales. Este nunca llegó y todo quedó en un mal sabor de boca en un equipo que se había acostumbrado a ganar siempre a nivel continental.
Leicester sigue alargando su hazaña con cada paso en Champions. Pase lo que pase, la proeza ya llegó a cuartos de final.