Como si fuera un calco de partidos anteriores, Alberto Gamero habló con los medios tras la derrota en Tucumán. Con mucha desilusión, explicó que no ha podido comprender lo que sucedió en el Monumental José Fierro.
Sin tanto análisis, el samario retrató con sus palabras lo sucedido en el terreno de juego. Los 10 minutos de terror que vivió su equipo, cuando recibieron 3 goles, también lo sacudieron a él. No buscó culpables, simplemente se refugió en una verdad irrefutable: “¡El fútbol es así!”.
“El partido comenzó siendo un trámite. Lo teníamos controlado y estaba todo bien. Luego llegaron 15 minutos de descontrol. Ahí nos metieron los tres goles y ya no pudimos revertir las cosas”, declaró.
Uno de los periodistas le preguntó el porqué esperó hasta el segundo tiempo para hacer los cambios. Al minuto 30 su equipo ya perdía por goleada y su reacción solo vino hasta el entretiempo. Él dijo que no quería exponer a su equipo a algo mucho peor.
“Con las variantes que hicimos nos arriesgamos. Lo hicimos, pero lo hicimos tarde. Antes nos hubiese salido más caro. Tal vez hubiésemos logrado anotar otro gol con esos cambios. Con el marcador adverso pudimos hacer esos cambios”, afirmó.
Además, explicó por qué no pensó en construir un equipo que cuidara la ventaja que traían de Colombia. Para él, un equipo como el que tiene no está diseñado para resguardarse en la defensa.
“Este mismo equipo le ganó a Carabobo y a Tucumán en Cartagena. Este equipo venía ganando, ¿cómo lo cambio? Lo que pasa es que hoy perdieron la chispa. Ellos nos jugaron bien”.
Finalmente, no buscó excusas ni argumentos. No encontró la forma de explicar lo que ocurrió en cancha.
“Tengo que destacar de este grupo la entrega. Nos toco afrontar algo que no traíamos en el presupuesto. Lo peor que pensamos fue en un 2-0. Nos desconcentramos y nos cobraron con todo”, finalizó.