El Departamento tiene aproximadamente 20.600 hectáreas de café, de las cuales el 55 % se concentran en Ciénaga, es decir, un poco más de 12 mil hectáreas; mientras que Santa Marta reporta un 25 % del total, seguido de Fundación y Aracataca.
Cuando restan alrededor de cuatro semanas para cerrar la cosecha cafetera comprendida entre octubre del presente año y enero del 2018, el director Ejecutivo del Comité de Cafeteros del Magdalena, Edgar Ramírez, afirmó que la recolección redondeó los 12 millones de kilos.
La recolección de café en el Departamento que comenzó en octubre en los municipios de Fundación y Aracataca, entró en su fase final, solo restan los cultivos de las jurisdicciones de Ciénaga y Santa Marta.
El director Ejecutivo del Comité de Cafeteros del Magdalena, Edgar Ramírez, señaló que a pesar que la cosecha tuvo un comienzo complicado debido a que en noviembre se incrementaron las lluvias en el Departamento, esto no impidió que se lograran los números pronosticados y además se mantuviera la calidad del producto.
“Hubo una disminución en la producción, entre un 10 o 12 % de las proyecciones, sin embargo, la cifra de la cosecha es muy positiva para los caficultores del Magdalena. También hay que añadir las lluvias no afectaron la calidad del grano que ya es reconocido en el mercado internacional, y sobre todo los cafés especiales que es la fortaleza de la caficultura del Departamento”.
Destacó que hubo una buena calidad de los programas de café orgánico, comercio justo, café de sello y café sostenible en general, “y sobre todo en este final de diciembre, con este clima, hace que el café sea más fácil de secar, y este más listo para vender”.
Ramírez subrayó que las asociaciones de caficultores del Departamento reportaron que han tenido una producción razonablemente voluminosa, además explicó que ahora solo están a la espera que los precios repunten, porque actualmente en la bolsa de Nueva York el precio está oscilante entre 1.20, y 1.30, dólares.
“Para los productores es difícil vender a ese precio, no obstante que recibimos bonificaciones por ser cafés especiales, entonces se está desarrollando la entrega de café de manera lenta, están esperando que haya algún repunte en la bolsa y pueda mejorar el precio”, aseveró.
En el 2018 promete la cosecha
El director Ejecutivo del Comité de Cafeteros del Magdalena, Edgar Ramírez, manifestó que para el 2018 las proyecciones muestran que los primeros tres trimestres serán de un periodo seco, lo que permitirá una mejor preparación de la cosecha y esto dará un resultado abundante.
“Esto a nivel general es muy positivo para nosotros. Está la movilidad y en este sentido esto facilita el trabajo porque las carreteras estarán secas, en buen estado. Actualmente las comunidades están aprovechando para hacer mantenimiento en las vías terciarias y esperando que se puedan cristalizar convenios con las cuatro alcaldías que son la de Ciénaga, Santa Marta, Fundación y Aracataca, también con la gobernación para aprovechar este primer trimestre del año y poder intervenir las vías de una manera que dure ese trabajo durante el resto del 2018”, indicó.
Mil 300 hectáreas esperan renovar en el 2018
El director Ejecutivo del Comité de Cafeteros del Magdalena, Edgar Ramírez, explicó que en el gremio en el ámbito nacional existe una buena expectativa por la decisión del Gobierno Nacional de apoyar en un plan a largo plazo la renovación de cafetales.
“En el pasado Congreso de Cafeteros el Gobierno Nacional manifestó que desde el 2018 hasta el 2024 va a garantizar la renovación de alrededor de 100 mil hectáreas al año, esto garantizaría mantener una producción nacional importante y evitaría perder participación en el mercado internacional”.
En lo referente al Departamento, aseveró que en el Magdalena para el próximo año la meta es de renovar mil 300 hectáreas “por esta razón el Comité Departamental compró semilla mejorada, la cual fue entregada a los productores en septiembre y estamos en una campaña intensiva de renovar los cafetales con variedades resistentes a la roya desarrollada en Cenicafé y la práctica de la zoca en los cultivos tecnificados envejecidos”.
Por Víctor Peñaloza
Redactor de EL INFORMADOR