El articulado que busca actualizar el viejo Código de Policía sigue generando divisiones al interior del Congreso de la República. Uno de los principales puntos criticados que trae este proyecto tienen que ver con la posibilidad de que la Policía pueda ingresar a una residencia de manera perentoria sin tener que esperar una orden judicial.
El ponente del proyecto, el senador de Cambio Radical, Germán Varón, defendió esta propuesta: “Entre el derecho a la inviolabilidad del domicilio y el derecho a la vida ¿Cuál prevalece? Pues el derecho a la vida. La norma establece que solo podrá entrar la policía cuando se lo piden de adentro en casos donde la gente está siendo agredido, en riesgo o atenta desde allí contra terceros”, explicó.
La senadora y exfiscal, Vivian Morales, manifestó que por falta de tiempo el proyecto estaría prácticamente hundido: “Este proyecto es irreal, no alcanza ya a salir. Se hunde en junio”, enfatizó.
La senadora Claudia López aseguró que “es una norma importante, es un código muy viejo de hace más de 30 años que tiene normas bastante arbitrarias y abusivas. Lo que estamos tratando de hacer con esta actualización es, en algunos puntos, acotar las funciones de policía pero también de darle herramientas para que pueda lidiar con el mal vecino que invade el espacio público, con el ruidoso, y no que las querellas relacionadas con convivencia se demoren en resolverse dos y hasta cinco años”, explicó.
Otro de los artículos polémicos trata sobre regular la protesta social y estar sujetas a permisos de las autoridades locales. El senador, Jorge Enrique Robledo dijo que “el polo votará negativamente sobre los artículos medulares que tratan esta materia. Recortan las libertades ciudadanas y van en contra del derecho a reclamar de las gentes”.
La actualización del Código de Policía también contempla sanciones por las agresiones o violación de la intimidad de una persona a través de redes sociales, de manera que quien publique fotos de otra persona sin autorización deberá pagar altas multas.
También se busca que los establecimientos encargados de comprar y vender celulares cuenten con una autorización expedida por el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, y que aquellos que comercializan equipos robados sean cerrados.
Adicionalmente, autoriza a la Policía para que acuda y garantice que los establecimientos nocturnos y fiestas privadas cumplan con los límites de ruido permitidos y no perjudiquen unidades de vivienda o zonas residenciales.
El proyecto del nuevo Código también plantea prohibir que los vehículos de servicio público usen sus equipos de sonido con alto volumen para evitar incomodidades y problemas de convivencia entre pasajeros y conductores y prohíbe hacer grafitis en bienes culturales o zonas que no fueron habilitadas para estas expresiones artísticas y urbanas.
Las malas conductas ciudadanas como hacer fiestas ruidosas, botar la basura o los escombros en la calle, ‘colarse’ en los sistemas de transporte público o publicar fotos privadas de otras personas sin su autorización serán objeto de sanción en el proyecto de ley.