La tragedia dejó en evidencia la negligencia y los fallos en los servicios de protección infantil.
Un juez en Guatemala acusó a cinco personas más por la muerte de 41 adolescentes en el incendio en un refugio administrado por el gobierno en marzo.
Los cinco incluyen dos policías y tres funcionarios del gobierno que fueron arrestados a principios de este mes. Se enfrentan a varios cargos, incluyendo homicidio y negligencia.
Los fiscales dicen que el incendio en el refugio de la Virgen de la Asunción comenzó cuando una de las chicas quemó un colchón después de un disturbio.
Ellos habían sido encerrados en una habitación después de intentar escapar y protestar contra el hacinamiento y el abuso sexual alegado por el personal.
Informes dicen que la capacidad de la casa en San José Pinula es de 400. Pero que muchos más niños estaban viviendo allí en ese momento.
Los acusados
Los funcionarios acusados son miembros de alto rango de los organismos sociales y de protección de la infancia. Dos, Brenda Chaman Pacay y Harold Augusto Flores, son acusadas de homicidio, y una tercera, Gloria Patricia Castro Gutiérrez, de negligencia.
Los policías, Luis Armando Pérez y Lucinda Marroquín, enfrentan cargos de abuso.
El ex director del refugio, el exministro de Bienestar Social y su adjunto fueron acusados en abril.
La tragedia ha puesto de relieve los fallos en los servicios de protección infantil de Guatemala.
Meses antes de la tragedia, los fiscales habían recomendado que el refugio, cerca de la ciudad de Guatemala, fuera cerrado por las denuncias de abuso.
El refugio acoge a niños hasta la edad de 18 años que han sufrido abuso o han sido abandonados.
Los medios locales dijeron que el refugio también funcionaba como un centro de detención juvenil, al cual los jueces enviaban adolescentes involucrados en casos criminales.