Las autoridades brasileñas incautaron hoy 453 kilos de cocaína en el puerto de Santos, sureste del país, escondidos en una embarcación que tenía como destino final el puerto de Liverpool, en Inglaterra, previa parada en Amberes, Bélgica, informaron fuentes oficiales.
La droga fue localiza en el puerto de Santos, el mayor de Latinoamérica, y estaba envasada en tabletas, insertadas en 16 bolsos de tejido escondidos dentro de dos contenedores de una carga de papel, según un comunicado de la Receita Federal (Fisco).
Santos, en Sao Paulo, es uno de los principales puertos de salida de la droga producida en Latinoamérica y que llega a Brasil procedente de países vecinos como Colombia y Paraguay.
La semana pasada, la aduana de este puerto decomisó 450 kilos de cocaína repartida en sacos de azúcar orgánico que también estaban dirigidos a Europa.
En lo que va de 2018, las autoridades aduaneras de Santos, ya contabilizada esta última operación, han decomisado más de 4 toneladas de cocaína.