El instituto prohibió que exámenes a detenidos lo hagan médicos en las regiones.
Los casos de corrupción en la justicia y que alcanzaron a Medicina Legal derivaron en una alerta que el propio director de la entidad, Carlos Eduardo Valdés, advirtió y que se convierte en la ante sala de una serie de medidas administrativas para evitar que funcionarios terminen tentados por delincuentes. Los casos de corrupción en la justicia y que alcanzaron a Medicina Legal derivaron en una alerta que el propio director de la entidad, Carlos Eduardo Valdés, advirtió y que se convierte en la ante sala de una serie de medidas administrativas para evitar que funcionarios terminen tentados por delincuentes. "Es muy triste para el instituto tener que registrar que funcionarios deshonestos se unan con bandas criminales, el Instituto ayudó en buena parte con la Fiscalía aportar los elementos de juicio que hoy tienen señalados a varios de los funcionarios". Entre las medidas se ordenó que los exámenes médico legales a delincuentes que buscan algún tipo de beneficio no los desarrollen funcionarios de la misma región donde se encuentre el detenido o solicitante. "Los exámenes que solicitan las autoridades judiciales a personas que hoy se encuentran detenidas o vinculados a procesos, esos exámenes no los están realizando médicos de la región sino los que provienen de otros sitios que no son conocidos en esa zona". Valdés lamentó la captura de funcionarios de la entidad enredados en casos de corrupción, con dictámenes que tenían como objetivo definir la situación jurídica de conocidos delincuentes.