Otra víctima cayó en este atentado. Ambos fallecieron minutos después de ser trasladados a un centro asistencial.
Dos policías fueron asesinados por desconocidos que los tirotearon por la espalda en un barrio de Arauca, considerada una zona de fuerte influencia de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), y una de las víctimas pertenecía al municipio de Ciénaga.
En un ataque atribuido a tropas especiales al margen de la ley, resultó asesinado el patrullero, oriundo de Ciénaga, Rafael David Martínez Lora, de 24 años, quien residía en la calle 30 con carrera 17 del barrio San Juan, al sur de este municipio.
El hijo de Carlos Martínez Algarín y la docente Zenith Lora, fue víctima de un atentado que ocurrió a las 7:40 de la noche del jueves, entre los barrios Libertadores y Miramar, en el Malecón turístico de Arauca y según las autoridades, parquearon su motocicleta frente a una vivienda cuando sorpresivamente dos sujetos llegaron al lugar en una moto de alto cilindraje, el parrillero se bajó, desenfundó su arma y les disparó a los dos policías y luego emprendieron la huida con rumbo desconocido.
Las víctimas mal heridas por los impactos de bala, de inmediato fueron trasladadas de urgencia al hospital San Vicente, donde fallecieron a causa de las lesiones.
Se estableció además, que el compañero de Rafael Martínez, que murió en este atentado, respondía al nombre de Cristian Anderson Palencia Rueda.
Los restos mortales de Martínez Lora serán traídos hasta su ciudad natal.
La guerrilla del ELN, que hace fuerte presencia en Arauca, ha perpetrado doce acciones terroristas desde que terminó el cese el fuego bilateral el pasado martes, informó ayer el ministro colombiano de Defensa, Luis Carlos Villegas.
"Ha habido cuatro voladuras de infraestructura petrolera, lanzamientos de granadas, asesinato a través de francotirador y dos hostigamientos", en los municipios de Orú y Saravena, departamentos de Norte de Santander y Arauca, ambos fronterizos con Venezuela.
El ELN comenzó este jueves una escalada de violencia en diferentes partes del país luego de que terminara el cese al fuego bilateral de 100 días con el Gobierno.
Por esa escalda terrorista, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, llamó a consultas a los negociadores de paz con esa guerrilla, que estaban en Quito.