El jueves en la tarde se firmó el acuerdo de paz entre las Farc y el Gobierno Nacional en La Habana, Cuba.
Según el acuerdo certifica que se dará el cese al fuego bilateral definitivo y la dejación de armas, y que un día después de la firma habrá 22 asentamientos y 8 campamentos en diferentes zonas del país en los que permanecerán los guerrilleros por un periodo de 180 días.
Entre esos campamentos, en el departamento de La Guajira estará uno en el municipio de Fonseca, más exactamente, en el corregimiento Conejo, en el cual estuvieron mandatarios de las Farc en meses pasados.
Este medio de comunicación habló con las víctimas del conflicto armado sobre su posición a la firma y cómo tomarían esta medida en el que el departamento fuera uno de los campamentos donde permanecerán los guerrilleros.
Edith Erazo, victima, manifestó que esta firma es un buen comienzo para la paz porque eso es lo que quieren para el país pero, que sean más responsables con las víctimas porque reciben una ‘miserableza’ de ayuda. Sin embargo, frente al campamento de las Farc, aseguró que no estaba de acuerdo a que los guerrilleros se asentaran en el territorio porque se sienten vulnerables ante ellos, sin saber si será verdad que dejarán las armas y no harán daños a los personas en el departamento.
“Que la paz no se quede en palabras porque ya tiene muchos años, para nosotros es difícil salir de nuestras tierras para venir a buscar donde refugiarnos, gracias a esas personas de buen corazón que nos han recibido aquí en Riohacha”. Afirmó Edith Erazo.
Por su parte, Marbelis Barros Redondo, dijo que no está de acuerdo con la firma de la paz porque no se sentiría tranquila que los integrantes de las Farc estén en el territorio. “Yo no me sentiría bien que esas personas que mataron tantas personas estén cerca de nosotros” aseguró.
Asimismo, la coordinadora de la mesa de participación efectiva Distrital, Sara Correa Chica manifestó que según estadísticas en Riohacha hay 69 mil víctimas del conflicto armado y que éstas deben ser tratadas con mucho cuidado para que vean esto como el camino a la paz.
Aseguró que el presidente quiere dejar una huella en el país para que la problemática sea resuelta. Además dijo que el Estado debe cumplir con las garantías que dan a las víctimas y preparar psicológicamente a las víctimas para que los integrantes de las Farc sean aceptadas en la sociedad.
“Nosotros necesitamos cátedra para aceptarlos, porque venimos pasando por momento de dolencia y a algunas víctimas no han tenido un acompañamiento psicológico y sería fatal que incluyan a la población de las Farc sin hacer un trabajo psicológico para el posconflicto”. Aseveró Correa Chica.
