Crítica es la palabra en que la Súper Intendencia de Salud encontró al Hospital San José de Maicao, al parecer por la situación que se vive al interior de la clínica; las mismas circunstancias justificaron la intervención, según aseveró Oscar Pernía Maldonado, agente interventor asignado por el gobierno central para gerenciar los destinos del centro asistencial.
El propósito central de la intervención es el de conseguir un camino para salvar al hospital, proceso que es respaldado por la Súper Salud que ofrecerá constantemente su asesoría y recursos durante los próximos doce meses.
Según Pernía Maldonado, la Superintendencia de Salud no ha llegado a la institución con el propósito malsano de acabarlo, sino para tenderle la mano y que pueda salir adelante, tal y como lo ordenó el superintendente Nacional de Salud, Norman Julio Muñoz y el Superintendente de medidas especiales, Javier Díaz Reales, quienes han gestionado recursos importantes para la E.S.E hospital San José fronterizo, los cuales estarán siendo efectivos en agosto próximo.
Estos recursos se destinarán exclusivamente para asistir los pasivos laborales que se tiene con funcionarios tanto de planta como con los contratistas. Junto con el médico Juan Carlos Jaramillo, subgerente científico de la entidad, el interventor nacional realiza en este momento visitas a las Eps, para ofrecer su respaldo para que vuelvan a creer en el hospital, el cual -según sus palabras- andaba bastante alicaído y desprestigiado por la mala calidad de los servicios que estaba prestando.
“El propósito es que vuelvan a contratar con nosotros” dijo Pernía Maldonado. Los acercamientos pretenden poner una sombrilla poderosa de hospital de segundo nivel que es, y haciendo algunos compromisos que van con servicios garantizados en un portafolio integral, a través de un trabajo de confianza que pueda garantizarles una buena atención a los pacientes que se puedan atender.
En rueda de prensa con los medios de comunicación, el interventor nacional dijo que esta figura administrativa no desmerita el convenio o contrato que ya estaba suscrito para la tercerización de la Unidad de Cuidados Intensivos –UCI- y que en principio hay que respetarlo. Sin embargo, advirtió que la superintendencia está revisando ese contrato.
“A mi modo de ver, y muy personalmente, creería yo y quisiera que esa UCI fuera del hospital, y poderla manejar yo como interventor, o en cualquier otro cargo, quisiera que fuera potestativo del gerente el que manejara la institución. Esa es una empresa dentro de la empresa, una empresa muy grande, lo que puede generar una UCI en cuanto a recursos con 49 camas, lo que sería un negocio redondo para nosotros “, dijo Pernía Maldonado.
La UCI se entregó bajo la figura de tercerización, y mientras la ley no diga lo contrario, la gerencia e intervención del Hospital San José deberán respetar y honrar el contrato, para que la Unidad siga funcionando así como se contrató. Mientras tanto, seguirá el trabajo articulado, ya que el hospital necesita de la Uci y viceversa.
A partir de hoy, el Hospital San José, funcionará con el personal estrictamente necesario, y quienes sean despedidos tendrán sus prestaciones, las cuales están aseguradas con cinco mil millones de pesos que llegarán próximamente, aseguró el alto funcionario.
