Una enérgica defensa de la Universidad de La Guajira, hizo un grupo de docentes y alumnos del alma mater en visita a una de las sesiones extras que por estos días lleva a cabo el Concejo municipal.
En criterio del docente Eider Fajardo, ante la crisis que se vive en esa institución por la deuda a los docentes, catedráticos, tutores y parte administrativa que ya asciende a los 60 mil millones de pesos y que tiene en riesgo la culminación del semestre, hay que reflexionar seriamente.
“Lo que se está perdiendo, no porque sea egresado de UniGuajira o porque labore como docente. Lo que estamos a punto de perder o lo que es peor, lo que está a punto de golpearse, es proyecto político, cultural y académico más grande en la historia de este departamento”, dijo.
Una estudiante de Ciencias Sociales y Humanas de la etnia wayuu, cuyo sector en el claustro universitario tiene 3.431 asistentes, manifestó que la Universidad le pertenece a todos, y que sus estudiantes exigen del gobierno una educación pública superior de alta calidad y con gratuidad, citando el artículo 67 de la Constitución Política.
“Nosotros como estudiantes hemos comprendido que el único vehículo capaz de transformar la sociedad es la educación. Un pueblo educado está llamado a sentarse a dialogar, y es hora que la sociedad Guajira tenga sentido de pertenencia por lo que es suyo, por lo que le corresponde.
Aquí hay que involucrar no solo al estudiante sino desde el tendero hasta la clase política que tiene a sus hijos allí preparándose, por eso no podemos ser ajenos a esta situación, pues generaciones tras generaciones vendrán a buscar su preparación en UniGuajira” expresó la estudiante.
En concepto del docente Isidro Brujes Cotes, hay una gran alianza de los gobiernos nacional y departamental para intervenir a la Universidad y lograr privatizarla y retirar la gratuidad cercenándoles los derechos a los jóvenes que se quieren preparar para el futuro.
“Desde el mes de julio no nos han pagado, y preferimos reabrir las actividades académicas para que los jueves no vayan a perder el semestre. Pero el gran problema no es este semestre. Que pasaría el próximo de la vigencia del 2017. Si no hay plata para este que está en curso, habrá para el primero y el segundo del próximo año?” Se preguntó el docente.