El anuncio lo dio Juan Fernando Cristo, ministro del interior
El gobierno nacional, en cabeza del Ministro del Interior, Juan Fernando Cristo informó que entre el lunes y el martes de esta se nombrará un nuevo gobernador que será el encargado del departamento de La Guajira después que Wilmer González Brito fuera imputado por los delitos de cohecho por dar u ofrecer, fraude procesal, falsedad en documento privado, concierto para delinquir, corrupción al sufragante y fue enviado a la cárcel La Picota.
Juan Fernando Cristo, también se pronunció respecto a este tema, y manifestó que "el Gobierno nacional se encuentra evaluando la difícil situación del departamento y las distintas opciones del orden jurídico y administrativo que permitan superar la grave situación política, económica y social que lamentablemente viven los habitantes de este departamento".
El presidente Juan Manuel Santos también se pronunció ante esta problemática en su cuenta de Twitter y dijo que “frente a la situación de La Guajira el Gobierno Nacional tomará medidas necesarias para garantizar el bienestar y tranquilidad de sus habitantes".
El jefe de la cartera política comentó que no hay lugar para convocar elecciones y que junto al presidente Santos iniciarán reuniones entre el lunes y el martes para solucionar la problemática que ha venido afrontando el departamento.
El Ministro del Interior recalcó que esta ocasión no se convocará a unas nuevas elecciones en el departamento puesto que es una vacancia temporal y no absoluta, por lo que la ley y la jurisprudencia fijan un mandatario encargado.
"La vacancia absoluta solamente se presenta cuando hay una condena judicial definitiva. Lo que procede jurídicamente es un encargo de la Gobernación", manifestó Juan Fernando Cristo.
Cabe recordar que el pasado 17 de febrero el Gobernador de La Guajira, Wilmer González Brito fue encarcelado después que encontraran pruebas en su contra como interceptaciones telefónicas donde organiza junto con un concejal de Maicao y un particular en la ciudad de Barranquilla la entrega de dinero para contratar el transportar sufragantes a sus respectivos puestos de votación. En las las llamadas hablaba de la obtención de "2.000 barras" -es decir 2.000 millones de pesos- para su campaña electoral.