“No habrá paz en Colombia mientras haya una narcodictadura en Venezuela”

Arellano afirma: “Estamos en el final de esa narcodictadura que se instauró con un discurso de paz, con un discurso de cambio, y lo que logró después de 18 años fue profundizar una hambruna, un estado totalmente sostenido por las mafias y los ilícitos internacionales.

Política
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La dirigente política considera que el país debe activar los protocolos de desplazamiento forzoso, ante la llegada de miles de venezolanos a Colombia, huyendo de la “dictadura” que hay en su nación.

Gaby Arellano, diputada venezolana, considera que una de las salidas que tiene hacia la democracia el pueblo venezolano es que se cumpla con la Constitución,  para acabar con la mafia que maneja el poder y que ha llevado al hermano país al caos institucional y social.

En entrevista con EL INFORMADOR, la joven diputada, aseguró que el Ejército de su país sea el que ponga orden en el poder Ejecutivo, para evitar un  desangre mayor. 

Agrega que en Colombia se deben tomar medidas para atender la situación en la frontera, como ayudas humanitarias establecidas por las organizaciones y convenios internacionales, ante el desplazamiento masivo de venezolanos. 

 Nicolás Ordóñez Ruiz (NOR): Estados Unidos opta por una intervención militar para recuperar la democracia en Venezuela. El expresidente Álvaro Uribe sugiere que el Ejército venezolano presione al régimen para que se haga a un lado y permita restaurar la democracia en la región. ¿Usted qué opina de estas posiciones? 

Gaby Arellano (GA): Lo que ha dicho el gobierno norteamericano es que no descarta ningún método o mecanismo para lograr  la libertad de Venezuela. Creo que la postura del presidente Uribe es una de las que más se ha analizado puertas adentro en Venezuela, ya  que no se está estableciendo disparar a nadie, sino que al contrario, se está estableciendo derrocar una dictadura, que son la cúpula de generales, las Fuerzas Armadas y el componente militar de nuestro país, para que no cumpla más órdenes del dictador, sino que cumpla la Constitución. La Constitución no es cumplida porque tienen secuestrados los poderes del Estado, entre eso el estamento militar es uno de los principales responsables de la vivencia y de las redes de mafia y narcotráfico a lo largo y ancho del país. Nuestra principal campaña y principal objetivo es que dentro de las Fuerzas Armadas se asuman posturas constitucionales y se alejen de cumplir órdenes dictatoriales.

NOR: ¿Usted considera que  es más viable la posición del expresidente Uribe que la del presidente Trump? 

GA: Yo creo que lo más lógico es hacer cumplir que las Fuerzas Armadas hagan lo que está en la Constitución, que es más o menos lo que plantea el expresidente Uribe. 

NOR: Hace unos días la escuchábamos en el Congreso de Colombia. Usted daba una posición sobre la situación de Colombia hoy con Venezuela, dos patrias hermanas. Decía que debería el gobierno colombiano declarar un estado de emergencia en la frontera colombo-venezolana, ¿por qué? 

GA: Por una razón muy clara: el éxodo del venezolano hacia Colombia ha sido muy, muy alto. Después del 30 de julio las cifras se han incrementado de manera alarmante. Antes del 30 de julio estábamos hablando de 12.000 a 10.000 venezolanos que entraban a Colombia; hoy estamos hablando de 25.000 y esta cifra va incrementando y la mayoría de ellos no están de manera legal: Lo que buscan en Colombia es libertad, comida y oportunidades de trabajo y es necesario que los protocolos internacionales que están establecidos en la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) o en el protocolo de la Organización de Naciones Unidas (ONU), con todas las cláusulas de Acnur, se activen en toda la frontera colombo-venezolana. Para ello un colombiano debe reconocer que hay una crisis humanitaria  que hoy se evidencia en todo el Norte de Santander cuando 2.000 venezolanos duermen en las plazas, miles de venezolanos están en las calles, miles de venezolanos viven de la gracia del colombiano, de darle un bocado de pan, un agua  con azúcar  que es lo que medianamente les dan. Prefieren dormir en una plaza, en cualquier calle de Colombia, que vivir en una casa en Venezuela porque la dictadura pues no salva el derecho a la vida, ni las oportunidades básicas que todo ser humano debe tener.

NOR: ¿Cómo ve usted la situación, en qué etapa de la dictadura se está?

GA: Yo creo que estamos en el final de esa narcodictadura que se instauró con un discurso de paz, con un discurso de cambio y lo que logró después de 18 años fue profundizar una hambruna, un estado totalmente sostenido por las mafias y los ilícitos internacionales. Todos esos carteles que lamentablemente confluyen en Venezuela y que han llevado a un grado de mortandad, de presión, tanto económica como social en nuestro país,   requiere de ayuda del concierto internacional para el clamor del pueblo que ha estado en la calle, en 120 días, pues se evidenció un alto grado de represión, donde se mostró y se desenmascaró para toda la comunidad internacional que el 90% del país quiere vivir en libertad, que el  90% del país está en contra de los planteamientos de Nicolás Maduro  y que el 90% del país quiere a través del voto conciliar la salida a esta profunda crisis que tiene nuestro país.

NOR: Hablando de lo del 16 de julio, vimos que se triplicó la expectativa de los votos que tenían para sacar a nivel internacional, ¿eso lo desconoció la dictadura de Maduro? 

GA: Creo que esta crisis que está en nuestro país, está rescatando valores de mucha idiosincrasia  venezolana. Son más de 500 ciudades donde hay centenares  y miles de venezolanos, yo creo que el cálculo que se dio, o la cifra del censo que se dio arrojado post 16 de julio, casi 2.000.000 de venezolanos a lo largo y ancho del mundo, donde hoy hay una organización desde afuera para apoyar y ayudar  a quienes permanecemos entre Venezuela en ayuda humanitaria y también en ayuda para que el concierto internacional se alinee para conquistar la libertad. Más allá de deprimir tratar de llevar a la población venezolana a una sumisión dictatorial, es un gran riesgo, es un gran peligro que tiene la región, al seguir estando en la cúpula del poder venezolano, mafias, que tienen tentáculos a lo largo y ancho de Latinoamérica.

NOR: Hay un sector de opinión muy fuerte en Colombia que dice que tenemos el riesgo de convertirnos en Venezuela. ¿Usted cree que hoy día Colombia tiene ese riesgo?

GA: Creo que ese riesgo está a lo largo y ancho de Latinoamérica. El foro de Sao Paulo fue un proyecto regional donde unos falsos dilemas se han planteado en dividir a las sociedades, en diferenciar las estratificaciones sociales para deprimir, donde insisto, las mafias, los ilícitos son los que se han apoderado. Ese proyecto que el difunto Chávez con la petro-chequera venezolana trató de instaurar en toda Latinoamérica, hoy sigue latente en Colombia y en cualquier parte de la región, porque esos falsos dilemas donde se utilizan términos que todo mundo quiere como valores humanos, pero que se tergiversaron debajo de las mesas con instalar sistemas y modelos basados en los ilícitos, en las mafias, en lo ilegal, en lo que oprime más al pueblo. Creo que es una amenaza para toda Colombia y para toda Latinoamérica, por qué lo que hizo el difunto Chávez fue crear unas divisiones que no están en el gentilicio de Latinoamérica.

NOR: ¿Qué posición debería tomar un nuevo gobierno en Colombia para ayudar a la crisis en Venezuela? 

GO: El tema de la crisis humanitaria en la frontera es de urgencia inmediata, de horas, porque entre más venezolanos ingresen al territorio colombiano, sino se toman las medidas pertinentes, no se hacen los protocolos que requiere un desplazamiento forzoso de miles y miles de ciudadanos, pues para Colombia se va a convertir en un problema.  Como en el Norte de Santander, donde hay venezolanos que están llegando con problemas de epidemias en la piel que al no tener asistencia médica afectan  a todos los colombianos. Hay problemas de inseguridad, de insalubridad, que son una amenaza muy latente. Así que la crisis humanitaria no puede esperar semanas, insisto, lo que estamos exigiendo en trabajo conjunto en la Asamblea Nacional venezolana con el Congreso Colombiano es que juntamos esfuerzos, para que los protocolos internacionales establecidos en estos momentos de desplazamiento forzoso se activen. Como en el pasado lo fue Venezuela para Colombia, cuando en Colombia existía un conflicto bélico, miles de colombianos pasaron hacia Venezuela y Venezuela les dio oportunidades. Hoy lo que estamos pidiendo en voz  los venezolanos es que los venezolanos no quieren ser un estorbo en Colombia, quieren dar sus aportes anhelando todos los días volver a Venezuela en libertad. No hay paz en Venezuela; mientras hay conflicto bélico en Colombia, y no hay paz en Colombia, mientras haya una narcodictadura en Venezuela.

NOR: ¿Qué concepto tiene usted de esa constituyente de Maduro? 

GA: Creo que es el modelo fraudulento del comunismo cubano que pretende tener a una sociedad en su misión total, mientras que los narcos dominan con los grupos islamistas extremos un modelo que pretende con discursos que se alejan de las acciones. La fraudulenta constituyente es lo peor del castrocomunismo cubano.