De Luis Suárez a Luis Suárez

Deportes - Internacional
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger


Madrid, (EFE).- En uno de los periodos de traspasos más austeros que se recuerdan en LaLiga Santander española por los problemas económicos generados por la pandemia, el uruguayo Luis Suárez cambió el Barcelona por el Atlético de Madrid. Pero no es el único. Otro Luis Suárez, colombiano, se estrenará con el Granada.


De Luis Suárez a Luis Suárez. Uno, el uruguayo, sale de Barcelona por la renovación del plantel prometida por el nuevo entrenador culé, el neerlandés Ronald Koeman, y tras una tortuosa negociación acabó recalando en otro de los pretendientes del título: el Atlético de Madrid que dirige el argentino Diego Pablo Simeone.

Los rojiblancos, que buscaban un nuevo delantero para mejorar sus pobres cifras goleadoras del curso pasado, encontraron en la búsqueda de un nuevo destino del charrúa el '9' de garantías que deseaban -hizo dos goles y una asistencia en su debut ante el Granada-, por lo que desecharon otra de sus opciones, también de nombre Luis Suárez pero de otra procedencia: Colombia.

El punta de 22 años de Santa Marta, propiedad del Watford inglés, sonaba entre las opciones que barajaban varios conjuntos después de haberse destapado con 19 goles en 39 partidos oficiales con el Zaragoza, un histórico del fútbol español actualmente en LaLiga Smartbank (Segunda División). Finalmente fue traspasado al Granada, donde ya ha tenido sus primeros minutos. Allí podrá forjar sociedad con el extremo brasileño Robert Kenedy, cedido por el Chelsea.

Entre uno y otro, un buen ramillete de jugadores latinos aspiran a destacar en la competición española. Al Atlético también llega otro uruguayo, el centrocampista Lucas Torreira, procedente del Arsenal inglés, para cubrir el hueco que deja el ghanés Thomas Partey, rumbo al conjunto 'gunner' previo pago de la cláusula de rescisión de su contrato.

Al campeón de la Liga Europa, el Sevilla, llega al lateral argentino Marcos Acuña, dispuesto a reforzar el hueco dejado por el español Sergio Reguilón, retornado al Real Madrid y desde ahí traspasado al Tottenham Hotspur inglés.

Por esa misma banda espera seguir batiendo récords de velocidad el ecuatoriano Pervis Estupiñán, que cambia el Osasuna por el Villarreal esta vez como traspasado desde el Watford inglés. A la defensa del 'submarino amarillo' también se suma otro joven valor del fútbol suramericano, el central Juan Foyth, cedido por el Tottenham.

Desde el Watford también retorna a España el colombiano Juan 'Cucho' Hernández, que el curso pasado dio un buen rendimiento al Mallorca pese al descenso del club balear, y ahora jugará en el Getafe como cedido.

En el Real Betis se cuentan dos regresos a España de relumbrón con bandera chilena: el entrenador Manuel Pellegrini y el portero Claudio Bravo. Otro chileno de larga experiencia, el extremo Fabián Orellana, cambia esta temporada el Eibar por el Real Valladolid, donde espera seguir brillando por la banda.

Entre los debutantes en la competición, destaca el centrocampista peruano Renato Tapia, que tratará de ayudar al Celta de Vigo a no pasar los apuros que tuvo la temporada anterior para mantener la categoría.

Con el recién ascendido Cádiz regresa a LaLiga Santander el hondureño Anthony 'Choco' Lozano, dispuesto celebrar con la grada amarilla muchos más goles que en su anterior paso por la máxima categoría del fútbol español, con el Girona en las campañas 2017-18 y 2018-19.

También vuelve a la competición el brasileño Deyverson, al mismo Alavés con el que ya sorprendió hace cuatro temporadas; el uruguayo Gastón Silva, que disfrutará en Huesca una competición que conoció hace cuatro campañas con el Granada, y los delanteros argentinos Guido Carrillo y Lucas Boyé tratarán de que la aventura de su compatriota Jorge Almirón al frente del Elche sea lo más exitosa posible, en la primera experiencia española del preparador.

Un mercado de fichajes atípico en el que se negoció hasta última hora para cerrar un libro de pases con importes menos abultados que en otras ocasiones pero la misma exigencia en la competición, aunque los estadios sigan vacíos por la pandemia. EFE