Sube la impopularidad

Editorial
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Hace mucho tiempo no se veía ni se sentía la alta desaprobación del pueblo colombiano hacia un presidente en ejercicio; el presidente Petro sigue batiendo récord con su  gestión presidencial, que según respetables encuestadoras, cayó en el último mes al alcanzar una tasa de desaprobación del 61 %, lo que ratificó que en casi un año de gestión, ya demostró lo que nos espera en los próximo tres años.

El presidente debe dar gracias por estos resultados, porque no se sabe a donde llegaría su impopularidad cuando la midan y le pregunten por su hijo Nicolás Petro Burgos y por su hermano, Luis Fernando Petro, los más corruptos del gobierno actual, que también deben comenzar a agradecerle al presidente su pelea con el Fiscal, por que ya arrojó el resultado esperado; Petro Burgos le quitó un peso de encima a su proceso judicial,  al recusar al Fiscal asegurando desde ya, un mejor camino al mismo.  

Este sondeo en el que se interrogó telefónicamente a 700 hombres y mujeres mayores de edad, tuvo lugar días después de que el mandatario forzase una prematura remodelación de su gabinete ministerial reemplazando a siete jefes de carteras, entre ellas la de Hacienda, Interior y Salud, que a excepción de esta última cartera, las dos primeras estaban en cabeza de ministros sensatos y coherente, dejando en los ministerios a los más rancios comunistas del corazón de Petro, que a propósito, ya comenzaron a tener sus desacuerdos, como el que están protagonizando la Ministra de Minas y el Ministro de Hacienda con respecto al tema de los precios de la gasolina; pelea de trenes, porque son de los superpesados y cercanos al corazón izquierdista de Petro. 

Este pedido de renuncia protocolaria a todo su gabinete, que se sumó a los tres ministros relevados el pasado febrero, Educación, Cultura y Deporte, puso de manifiesto la sensación de intranquilidad del 51 % de los encuestados y la conformidad del 31 % de ellos. En el marco de una crisis política detonada por la falta de apoyos a sus reformas en un Congreso en el que Petro ya no cuenta con mayorías, la región oriental, el distrito capital de Bogotá y la región central se consagraron como las de mayor oposición al manejo que Petro está haciendo del país con un 72 %, 65 % y 64 % de desaprobación, respectivamente.

Al calor de los debates para lograr la aprobación de reformas como la de la salud, la encuesta tuvo en cuenta la opinión sobre que el mandatario aliente una revolución desde el balcón de la presidencia de la República, ya que según el mismo presidente, el intento de coartar las reformas pueden llevar a una revolución,  discurso que emitió el pasado 1 de mayo durante su segundo "balconazo" en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo.

Los colombianos pensaban que la destrucción y muerte que crearon los miembros de la Primera Línea, ya estaban superados y que esos momentos terribles ya habían sido superados; pero, se equivocaron, las amenaza está latente y en cualquier momento son convocada para volver  a sembrar el terror y pánico. Por eso, en la misma encuesta cuando fueron interrogados al respecto, el 68 % de la muestra manifestó estar en desacuerdo con este alentamiento a la revolución, dato al que se agrega el rechazo del 58 % de los encuestados a los discursos del mandatario desde el balcón del edificio presidencial; así sigue Petro su desgaste natural del gobierno, que en su afán de protagonismo y tiranía, no ve el daño que se está haciendo.

Otros de los temas que los colombianos aprovecharon para expresar su opinión libremente, fue con el tema de la paz y al respecto, con base en los avances del Gobierno en la paz total, la región oriental fue la que peor valora esta cuestión con un promedio de 1,8 en una escala de 1, muy mal a 5, muy bien. En esta zona, se encuentran convulsas regiones como la del Catatumbo, en el departamento del Norte de Santander, donde operan la guerrilla del Ejército Nacional de Liberación, Eln; el frente 33 de las disidencias de las Farc; un reducto del Ejército Popular de Liberación, Epl y algunas bandas criminales.

La región central fue la segunda que más negativamente valoró los avances en materia de paz total con un promedio de 1,9. En esta área destacan departamentos como el del Meta que donde tienen presencia grupos disidentes de las Farc, el Eln y las paramilitares Autodefensas Gaitanistas de Colombia, Agc, también conocidas como Clan del Golfo.