Joe Biden superó la tartamudez cuando era niño, se convirtió en senador de los Estados Unidos a los 29 años, más tarde ocupó la vicepresidencia durante la era Obama y ahora es el presidente electo de su país, pero no todo han sido victorias.
Las tragedias de Biden lo han hecho una persona más empática que, según sus amigos, exasesores y compañeros en su estado natal de Delaware, lo convierten en un político cercano a la gente y auténtico.
A su lado, en los triunfos y en los momentos más tristes, ha estado su esposa Jill, una profesora que conoció en una cita a ciegas hace más de 40 años y con quien tiene una hija, Ashley.
Trágico accidente
En 1972, Biden estaba a punto de convertirse en el sexto senador más joven de la historia de Estados Unidos tras ser elegido por Delaware, el Estado donde creció, cuando recibió una llamada que le informaba del accidente de coche en el que su esposa Neilia, de 30 años, y su hija pequeña, Naomi, de 13 meses, murieron. Los dos hijos varones, Beau, de tres, y Hunter, de dos, resultaron heridos de gravedad.
Tras la pérdida, Biden consideró renunciar a su escaño, pero finalmente juró unas semanas después desde el hospital, junto a la cama de uno de sus hijos que se recuperaría del choque.
Durante años, el ahora presidente electo iba y venía en tren desde su ciudad, Wilmington, a Washington, D.C. para poder estar con sus hijos. El viaje de una hora y media que hizo cada mañana para regresar por la noche a casa le valió el apodo de “Amtrak Joe”, en alusión al nombre de la red de trenes de pasajeros estadounidense.
Jill le devolvió la vida
Años después, Biden empezó a salir con una profesora divorciada, Jill Jacobs, a quien conoció gracias a una cita a ciegas organizada por su hermano; Biden volvió a encontrar en Jill el amor.
Perder a otro hijo
Luego de acompañar al expresidente Barack Obama durante ocho años como compañero de fórmula, Biden optó por no presentarse como candidato demócrata a las elecciones de 2016. La tragedia volvió a tocar su puerta. Su hijo mayor, Beau, había muerto de cáncer cerebral a los 46 años.
Tres años después Biden decidió que era momento y, durante la campaña de 2020, Beau estuvo siempre presente. En el cierre de la Convención Demócrata le rindió tributo y recordó la vida y carrera de su hijo, que se estaba convirtiendo en una estrella del Partido Demócrata.
Los escándalos de Hunter
Alcohol, drogas, un matrimonio fracasado, la relación sentimental con la viuda de su hermano y varios centros de rehabilitación han causado polémica en la vida de su hijo Hunter. Pero Biden lo ha apoyado siempre y también ha salido públicamente en defensa del único hijo con vida que le queda de su primer matrimonio.