Los países de la Unión Europea y la Eurocámara llegaron a un acuerdo para que el desembolso de los fondos europeos a los países miembros respete los principios del Estado de Derecho, lo que era fundamental para activar el Fondo de Recuperación de 750.000 millones de euros para afrontar la pandemia.
El acuerdo final prevé que se puedan suspender o reducir fondos europeos cuando se produzcan violaciones del Estado de Derecho que afecten de un modo directo a la buena gestión del presupuesto de la UE o a los intereses financieros de la Unión.
El mecanismo para vincular el dinero a valores como la independencia judicial, el respeto a los derechos fundamentales o la igualad legal, era uno de los puntos más espinosos de la negociación, por lo que, tras este acuerdo, ya solo queda por pactar el montante final del presupuesto europeo con el Parlamento Europeo.
Por otra parte, el incremento de los casos y las muertes por la Covid-19 en gran parte de la UE, cuyos países se ven obligados a adoptar nuevas restricciones a diario, ha cambiado el escenario económico a peor..
La UE prevé que el PIB español se contraiga un 12,4 % en el 2020 debido a la crisis de la hostelería y las pérdidas del sector turístico, una industria de vital importancia para España y cuya campaña de verano se quebró por la expansión de la pandemia. En cambio, el año que viene España estará por delante de Francia e Italia al crecer un 5,4 % según los datos del PIB.
La segunda ola de la pandemia retrasará la recuperación en toda Europa, y en el caso de España hará que se vaya extinguiendo el fuerte repunte registrado en el tercer trimestre, cuando el PIB creció un 16,7 % tras un desplome récord en la primera mitad de año, del 22,1 %..
Incorporando el impacto de los planes provenientes de los fondos europeos, las previsiones se situarían en un crecimiento del 8,2 % en un escenario central, de un 6,5 % para un escenario pesimista y de un 10 % para un escenario optimista.
Los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona, el Eurogrupo, la situación económica europea en donde se recalcó que es vital que el apoyo fiscal en cada Estado miembro continúe en 2021 dado el mayor riesgo de un retraso en la recuperación y recuerda que esto se complementará con medidas europeas. Los Diecinueve ven prioritario que el Consejo, institución que representa a los 27 Estados de la UE, y la Eurocámara lleguen a un acuerdo final sobre el Fondo de Recuperación de 750.000 millones de euros pactado en julio y confían en que lo hagan antes de finales de 2020 para que pueda estar en marcha en enero de 2021.
Algunos países, entre ellos España, no se plantean de momento utilizar los préstamos que podrían solicitar, sino solo las transferencias directas que, al no tener que ser reembolsadas, no elevan la deuda pública. La posición es que en los dos próximos meses se revise cómo están funcionando los distintos instrumentos que han sido eficaces para si es necesario abordar una modificación y adaptarlos a las necesidades del momento. En este sentido, es necesario actuar en la segunda ola de la pandemia de coronavirus con más apoyo monetario, ajustar herramientas para el próximo año y más allá, con base en las perspectivas de inflación a medio plazo.