Real Madrid, que tuvo a James Rodríguez como titular, sacó una buena ventaja este miércoles al derrotar 3-1 al Nápoles, en el juego de ida de los octavos de final de la Champions League.
El equipo ‘merengue’ empezó perdiendo el partido en el Santiago Bernabéu, pero a punta de buen fútbol y efectividad, se quedó con el triunfo en su casa.
Por su parte, James, quien actuó 76 minutos, tuvo un desempeño aceptable, intentó asociarse con Luka Modric y Toni Kroos. También le dio algunos pases a Cristiano Ronaldo y Karim Benzema con su prodigiosa zurda. El volante cucuteño hasta tuvo un mano a mano con el portero del Nápoles, Pepe Reina, quien con la mano, desvió el balón de James.
El equipo napolitano se fue arriba en el tablero muy temprano. El reloj marcaba 8 minutos cuando Lorenzo Insigne aprovechó un buen pase de Marek Hamsik para vencer a Keylor Navas, quien estaba bastante fuera de posición. Festejo para los italianos y silencio total en el Bernabéu.
Sin embargo, con su empuje de fútbol los conducidos por Zinedine Zidane lograron la igualdad a los 18 de juego. Karim Benzema, de cabeza, fue el encargado de convertir el 1-1 y a partir de ahí cambió la historia del compromiso.
El local se hizo con el control de la pelota, mientras que el Nápoles le apostaba al contraataque o una jugada aislada de José Callejón, Dries Mertens o de Insigne.
Para la segunda parte, Real Madrid logró un tanto más por medio de Toni Kroos, quien venció a Reina luego de una excelente habilitación de Cristiano Ronaldo. 2-1 y la tranquilidad reinaba en el Bernabéu.
El golazo del compromiso y el tercero y definitivo para los blancos fue de Casemiro. El volante brasileño aprovechó un rebote que le dejó servido James desde el piso y el ‘14’, sin dejar caer la pelota, sacó un riflazo, imposible para Pepe Reina.
El propio James tuvo una opción para poner el cuarto en el tablero, pero la mano de Reina evitó que el colombiano pudiera festejar. Minutos después de esa acción, Rodríguez Rubio fue relevado y en su lugar ingresó Lucas Vázquez. El cucuteño salió en medio de aplausos.
Al final quedó 3-1 para el Real Madrid, que espera mantener la ventaja en el cotejo de vuelta el próximo 7 de marzo, en el estadio San Paolo.