Lo que estaba destinado para ser una tarde épica y llena de felicidad para Mercedes Pérez, su familia y los samarios, finalizó con un trago amargo. La atleta local solo conquistó una presea de plata de las dos modalidades, más la sumatoria- que estuvieron ayer en disputa en los 63 kilogramos femenino de levantamiento de pesas de los XVIII Juegos Bolivarianos Santa Marta 2017.
El Coliseo del Inem Simón Bolívar estaba repleto para presenciar a la dueña de casa Mercedes Pérez, quien por primera vez en sus 15 años de carrera actuaba en un evento internacional en Santa Marta. Sus familiares con pancartas y con una franela estampada con la foto de la campeona samaria, la alentaban, el objetivo era repetir las actuaciones de Sucre, Bolivia- 2009 y Trujillo, Perú-2013.
Antes de la competencia de los 63 kilogramos femenina se desarrolló los 77 kilogramos masculinos, categoría en la cual Colombia hizo el uno-dos en las dos modalidades y sumatoria- con el protagonismo de Andrés Caicedo (Oro en envión, plata en arranque y oro en total) y Brayan Rodallega (plata en envión, oro en arranque y plata en total). Esta batalla entre los dos locales pronosticaba que la siguiente también tendría era rivalidad.
Las dos representantes de Perú, la de Argentina y Venezuela hacían su presentación, pero la escena tenía dos estelares: la samaria Mercedes Pérez y la también colombiana Lina Rivas. Ambas conquistaron diplomas olímpicos en Río.
En la modalidad de arranque la “guerrera samaria” en su primer intentó levantó 95, en el segundo 100 kg, sin embargo, en el tercero no pudo con 102 kg. Mientras que Rivas en su primera oportunidad falló con 100 kg, en la siguiente alzó 102 kg y finalizó con un levantamiento de 105 kg para adueñarse de la dorada. La plata fue para Mercedes Pérez y el bronce se lo acreditó Yurleidys Arriola de Venezuela con 85 kg.
A pesar del resultado en el arranque, la familia de Mercedes y el público samario seguía alentando a su campeona. Esperaban que se reivindicarán en la modalidad del envión, prueba que domina más.
Sin embargo, en esta modalidad llegaría la frustración para la atleta local. Lina Rivas comenzó su accionar levantando 120 kg, la samaria respondió con 122 kg, pero su levantamiento fue anulado por un mal movimiento y luego en sus dos intentos no pudo con 126 kg. Rivas terminó embriagándose de gloria con al finalizar con 125 kg. El cuadro de honor lo completaron la venezolana Arriola- plata con 105 kg y el bronce para la peruana Angie Cardenas con 103 kg.
En la sumatoria, Lina también cargó con el oro con 230; la plata fue para Arriola con 190 y el bronce lo obtuvo Eldi Paredes de Perú con 190.
La atleta samaria Mercedes Pérez a pesar de no cargar con el botín planificado, expresó: “gracias por tener esa confianza en mí, el pueblo samario se sintió, esta vez no se pudo y solo obtuve la medalla de plata”.
La triple dorada en los pasados bolivarianos explicó que en lo personal está contenta porque dio lo mejor de ella en la plataforma “como una guerrera que soy”.
Manifestó que esta actuación si le deja un sabor amargo porque trabajó para ganar. “No le pido perdón- porque solo se le pide a Dios, si pido disculpas al pueblo costeño”, indicó la atleta local que resaltó una vez más que entregó lo mejor en la plataforma “de corazón, de ganas y tranquila porque Mercedes hay para rato”.
La concentración fue clave
La oriunda de Santa Marta en su análisis en frío sobre su actuación, aseveró “de pronto me faltó un poco más de concentración, pero así es el deporte, tengo 15 años de carrera deportiva y hay veces que sí y otras que no. Esto me hace grande y responsable para seguir adelante”.
También reconoció que hubo presión el actuar ante la mirada de su gente. “Uno quiere ver a su familia sonreír, y muchos vinieron a observar a esa atleta nació en Santa Marta, estos detalles me llenaron un poco de presión y esa responsabilidad que tienes en la plataforma, sin embargo, me siento tranquila”.
Esta batalla entre colombianos que se dio en los Juegos Bolivarianos ya se había presenciado unas semanas atrás en el Campeonato Panamericano de la disciplina, lo que deja ver que el camino a Tokio 2020 será complicado entre los locales.
“Si en el Panamericano me tocó una grandísima lucha contra otra colombiana, soy una de las más veteranas de la selección, vienen unas juveniles pisándome fuerte”.
El deporte da revanchas y la samaria la próxima semana tendrá la oportunidad de tomar desquite en el Mundial de la especialidad a desarrollarse en Anaheim, Estados Unidos. “Sé que en el Mundial se va a escuchar el nombre de Mercedes, hay mucha sed y un proyecto grandísimo para ir a Tokio 20/20”.
Por Víctor Peñaloza
Redactor de EL INFORMADOR
Fotos/ Edgar Fuentes