Más de 11 millones de niños necesitan desesperadamente ayuda humanitaria en Yemen, un país azotado por la guerra y la hambruna, según alertó el Fondo de Naciones Unidas para la infancia (Unicef).
El sábado, un avión cargado de ayuda humanitaria de Unicef aterrizó en Saná, una novedad desde el bloqueo total impuesto a comienzos de noviembre por la coalición liderada por Arabia Saudita que interviene militarmente en Yemen. La coalición intervino en el país en marzo de 2015 para detener la progresión de los rebeldes yemeníes hutíes ante las fuerzas gubernamentales.
La ONU, que dice temer “la mayor hambruna” de las últimas décadas en Yemen, pidió a esta coalición que levantara rápidamente el bloqueo impuesto al país pues en caso contrario “miles de víctimas inocentes” van a “morir”.