Al menos 20 niños murieron en un accidente de un autobús en el que viajaban en las afueras de la capital sudafricana, Pretoria, este viernes, en el que también falleció el conductor, informaron los servicios de urgencias.
El autobús chocó por causas aún desconocidas con un camión en una carretera entre las ciudades de Bronkhorstspruit y Verena, a unos 70 kilómetros de Pretoria.
El portavoz de los servicios de urgencias ER24, Russel Meiring precisó que el balance anterior de 20 niños era en realidad de 19, y que el conductor se encontraba entre los fallecidos.
Meiring manifestó que cuando llegaron los servicios de rescate "los bomberos ya habían apagado el vehículo en llamas, que se encontraba volcado de lado".
Varios jóvenes quedaron atrapados dentro del vehículo, que quedó volcado en la carretera. Algunos pudieron ser extraídos por gente que llegó al lugar del siniestro.
A través de un comunicado ER24 explicaron: "Los niños heridos recibieron atención médica en el lugar antes de ser trasladados a varios hospitales en el área”.
"Estoy muy triste. Es un día muy triste para la educación", declaró Panyaza Lesufi, ministro provincial de Educación que acudió al lugar del incidente.
El viernes por la mañana, el ministro de Transportes, Joe Mawanganyi, recomendó a los automovilistas que reforzaran su vigilancia tras un alza del 51% de los accidentes mortales en el fin de semana de Pascua, con 251 decesos.
Pese al buen estado de las infraestructuras, cada día mueren en las carreteras 35 personas en Sudáfrica, 13.000 al año.
El alcohol, la corrupción policial y el elevado número de personas que circulan a pie por las autovías son algunas de las principales causas de muerte en las carreteras del país.