Se conocen detalles del interrogatorio que rindieron por la supuesta manipulación en la escena del crimen.
Las revelaciones indican que Rafael Uribe Noguera, el único capturado por el asesinato de la niña, le reconoció a sus hermanos tenerla en su poder y que en el transcurso del secuestro Yuliana trató de escapar y en ese intento se cayó de la camioneta, lo que explicaría algunas lesiones identificadas por Medicina Legal, una versión que según fuentes de la Fiscalía fue descartada de plano.
Más tarde y en su interrogatorio Catalina y Francisco Uribe Noguera aseguraron a la Fiscalía que nunca vieron a la niña, que no participaron de la supuesta manipulación de la escena del crimen en el edificio Equus 66, pero que su hermano les confesó donde tenía a la menor.
En los vídeos de seguridad que tiene la Fiscalía, al menos 30 y de los últimos tres meses, se observa (como una hipótesis de los investigadores) a Rafael Uribe cuando llega al edificio Equus 64 a unas cuadras de donde fue encontrada muerta Yuliana, allí estuvo por unos minutos, luego se movilizó a su apartamento y con conocimiento del vigilante, Fernando Merchán, consumó el crimen.
Todos los vídeos de seguridad, horas de seguimiento, son analizados por 20 investigadores que permanecen atentos a cualquier evidencia que sirva para identificar si hay más personas involucradas.