La persona que el sábado incitó a los mototaxistas a protestar, que terminaron enfrentándose con la Policía y atacando a la casa del Alcalde de Riohacha, está en la mira de las autoridades y en las próximas horas estaría librándose la orden de captura.
Así lo aseguró el coronel Tito Castellanos Tuay, comandante de Policía La Guajira, "se logró individualizar el líder que promovía este conato de desorden en el distrito, con la ayuda de vídeos y audios, elementos materiales muy fuertes", dijo.
El alto oficial manifestó que ya se denunció ante la Fiscalía y esta a su vez, solicitó al juez una orden de captura y el responsable deberá responder por todos los desmanes; tanto en el patio del tránsito como en la casa del señor Alcalde.
Desde hace mucho tiempo en Riohacha existen dos líderes: Javier Brito y Eduardo Ordóñez, pero últimamente, también ha oficiado como líder de los mototaxistas el abogado Luis Mejía Valdeblánquez, creando inclusive una fundación denominada "Prodefensa de los mototaxistas y derechos humanos".
En diálogo con Mejía Valdeblánquez, indicó que se pretendía realizar un paro, saliendo para Maicao, se llegaba a Uribia y luego a Riohacha, en donde el fin era hacer un paro indefinido y se provocó este escándalo, llamándolos de vándalo.
En su diálogo, el jurista, manifestó que el coronel Edgar Cárdenas agradió a un mototaxista y él también recibió golpes y le quitaron la pistola, devolviéndose minutos más tarde a un uniformado que acompaña al alto oficial. Esta versión fue desmentida por Tito Castellanos Tuay, comandante de Policía La Guajira y jefe de Cárdenas.
Según el abogado, esta acción un poco humillante en las filas de los uniformados, fue peor, puesto que el policial envió al Esmad que llegó atacando a los mototaxistas. Esta provocación generó violencia ya que el Escuadrón Móvil habría pegado a los mototaxistas latigazos, "siendo una forma de violencia, que hacía siglos, que no se veía. El coronel premeditadamente mandó a torturar a los mototaxistas".
Mejía Valdeblánquez, dijo que en la espalda de muchas personas quedó marcado el látigo con que los uniformados atacaron a los ciudadanos, inclusive a indígenas de la etnia wayúu.
También justificó la asonada de la casa del alcalde, porque el mandatario fue el motivador "quien motivó la resolución fue el alcalde y el disgusto es con él y es obvio que provoca en la reacción hacia la ida de la casa, pero no es intencional, sino provocada por la violencia de la policía y el Esmad que agradecieron a los mototaxistas", aseguró.
Indicó Mejía Valdeblánquez que de lo acontecido, no hubo liderazgo alguno, porque es lógico que se provocara un acto de violencia y su reacción es lo que ya la comunidad riohachera conoce.