Los amigos y compañeros de clases de Andrés Camilo Moscote Carrillo, estudiantes del Instituto Gardner relataron cómo ocurrieron los hechos, donde este último recibió una descarga eléctrica en el parque San Rafael del barrio Calancala de Riohacha.
Según los estudiantes lo describieron como un momento agónico lleno de nerviosismo.
Hoy están orgullosos de haber ayudado Andrés Camilo Moscote Carrillo a salir de ese trance.
“Me asusté mucho porque yo vi cómo se le torcían las muñecas a Andrés, le avisé a Adanies quien tuvo la valentía de halarlo” es el testimonio de Ángel Muñoz amigo y compañero de clases de Andrés Camilo, quien sufrió la descarga durante una clases de Educación Física.
Han pasado más de tres semanas desde que Moscote Carrillo sufrió el incidente en el parque San Rafael.
Actualmente, se encuentra recuperándose de una intervención quirúrgica en sus muñecas, las cuales resultaron fracturadas por la descarga eléctrica que recibió.
Contó Adanies Díaz Velásquez, que Ángel lo llamó insistentemente y le dijo mira a Andrés, se acerca, toca la baranda y le pasó corriente, "cuando lo vuelvo a mirar veo que está temblando en ese momento me lleno de valentía y lo halo con fuerza por la espalda para despegarlo, ahí le vi que las muñeca las tenía como salidas”.
Cuenta Cristian Sánchez, otro de los niños estudiante del grado sexto que su compañero Andrés Camilo duro varios segundos pegado a la baranda donde lo vieron temblar lo que llamó su atención y al acercarse también recibieron la descarga.
Manifestaron que al día siguiente lo notaron con mucho dolor en los brazos y pedía ayuda a ellos para guardar sus útiles ya que no podía mover los brazos.
“Nosotros nos asustamos mucho porque al día siguiente no fue a clases, y le preguntamos a la profesora Diana por Andrés Camilo y ella dijo que estaba bien que la descarga había sido algo normal y que no le dijéramos nada a nuestros padres” manifestó el niño Ángel Muñoz.
Los padres de Andrés Camilo manifiestan que tanto el rector como los docentes han querido minimizar la situación, pero agradecen a Dios la valentía de los niños por actuar con premura ante lo vivido. Durante estos días Adanies, Ángel y Cristian han compartido y acompañado a Andrés Camilo para hacer su recuperación más llevadera.