El Día Internacional de la Danza fue establecido por la Unesco en 1982, atendiendo a una iniciativa del Comité Internacional de Danza, perteneciente al Instituto Internacional de Teatro (ITI/Unesco).
Durante la conmemoración, cada año un personaje representativo de la danza envía un mensaje como homenaje a este arte tan exigente y admirado. Esta vez le correspondió a Alkis Raftis, investigador reconocido en el campo y presidente del Consejo Internacional de la Danza.
Como parte de la comunicación, Raftis reflexionó sobre la situación de la danza. “La actual crisis económica apenas afectó a las escuelas de danza: mientras que muchas empresas cerraron, muy pocas escuelas de danza lo hicieron, y en el peor de los casos solo perdieron algunos estudiantes. Esto demuestra, una vez más, que la danza es una de las necesidades más básicas: la gente opta por reducir otros gastos en lugar de dejar de pagar por sus clases de danza”.
Asimismo, señaló, “el arte, por definición, es incluyente, no excluyente. El Día Mundial de la Danza 2016 se dedica a mantener una política de puertas abiertas en la enseñanza de la danza”.