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Sáb, May

Obispo de Riohacha invita a no perder la esperanza de cambiar para bien

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El obispo de la diócesis de Riohacha Francisco Antonio Ceballos Escobar, envió un mensaje a la comunidad de La Guajira, para que no tiren la toalla y siga esperanzada, primero en las bondades de Dios y luego en las acciones de sus líderes elegidos recientemente para administrar la cosa pública de la península más grande del país.

Desde su sitio de descanso de fin de año en el Eje Cafetero, el obispo indicó que “debemos seguir esperanzados y cumpliéndole al pueblo, el pueblo siempre quiere elegir a los mejores y ellos deben seguir con la palabra firme, cumpliendo las promesas para que el pueblo siga esperanzado y descubran una luz más allá del túnel, eso es lo que necesitamos los guajiros que se cumplan las promesas que hicieron”.

El máximo pastor de la iglesia católica en La Guajira también se refirió a los políticos que no pudieron cumplir su objetivo en las elecciones pasadas porque el pueblo prefirió otras opciones, a ellos los invitó a que se unan a sus alcaldes o gobernador para que juntos trabajen por el pueblo.

Dijo que, si todos tienen la vocación de servicio, ahora deben unirse perdedores y ganadores “porque somos conscientes de que, si al Gobierno le va bien, entonces a todos nos irá bien. Hay que seguir luchando por una sana democracia, por el bien del pueblo para que todos vivamos en paz y armonía y por su puesto que nos consideremos todos hermanos, uniendo fuerzas para lograr éxitos futuros en La Guajira”.

La voz de aliento del obispo también fue dirigida a los ciudadanos que peregrinan en la Alta Guajira y en los sitios más abandonados de la península pidiéndoles que deben tener viva la esperanza en Dios y luego en los seres humanos.

“Lo último que los humanos deben perder es la esperanza, pero necesitamos el concurso de todos, para que mancomunadamente logremos los objetivos que nos hemos trazado como seres humanos y como comunidad. A los más pobres, a los huérfanos a los indígenas a los campesinos, a las viudas, a las mujeres cabeza de familia, para ellos mi bendición y mi recuerdo como pastor de la diócesis de Riohacha”, indicó Francisco Antonio Ceballos, uno de los 4.156 obispos diocesanos que están esparcidos por todo el mundo.