La Constitución redactada que instauró el expresidente Rafael Correa en 2008 para durar 300 años, puede tener los días contados.
Quito (EFE).- La Constitución que instauró el expresidente Rafael Correa en Ecuador en 2008, de la que dijo que duraría 300 años, puede verse con los días contados si el actual mandatario Daniel Noboa logra su propósito de establecer una Asamblea Constituyente que redacte una nueva Carta Magna, lo que será la cuestión principal del referéndum convocado para este domingo.
La actual Constitución tiene 444 artículos y Noboa -que no ha detallado qué temas planteará para una eventual nueva Constitución-, aspira que ésta sea “sencilla de entender, de interpretar, pero eficiente”, con unos 180 artículos.
Aunque analistas consideran que Noboa busca una Constitución a su medida, el gobernante sostiene que quiere una que proteja “los derechos ciudadanos”, sin tocar los derechos de la naturaleza donde la actual Carta Magna es pionera pero, pues cree que la actual Constitución protege a los delincuentes.
Para Noboa, la Constitución actual restringe el uso de la prisión preventiva y facilita que acusados de graves delitos estén libres gracias a recursos legales amplios (acciones de protección, hábeas corpus, medidas cautelares) que, aunque pensados para garantizar derechos humanos, han sido aprovechados por sus abogados para evitarles la cárcel.