La tarde del sábado, Maicao reunió a figuras políticas, sociales y familiares para la develación de la placa que bautiza con el nombre de Marcos Aurelio Iguarán Iguarán el recinto del Concejo Municipal.
El homenaje, cargado de emociones y memorias, contó con la presencia de familiares del dirigente conservador, concejales de Uribia, el excongresista Antenor Durán Carrillo, exgobernadores, exalcaldes y el representante a la Cámara, Jorge Cerchiaro. Para muchos asistentes, fue un espacio para recordar al exdiputado y exconcejal desde la cercanía, evocando los momentos donde marcó la agenda pública con firmeza y sentido social.
Un reconocimiento que resalta liderazgo, carácter y servicio público
Durante el acto, el alcalde Miguel Felipe Aragón —impulsor de la iniciativa— destacó que el homenaje por el valor del legado de un hombre que trabajó sin descanso por su tierra. Señaló que poner su nombre al recinto del cabildo es un mensaje directo a las nuevas generaciones sobre el significado real de la lucha social y la responsabilidad pública.
El reconocimiento se formalizó mediante el acuerdo 016 de 2024, documento que respalda de manera institucional la develación de la placa que exaltará permanentemente la memoria del líder Wayuu. Iguarán, recordado por su disciplina, visión y compromiso, en el ejercicio político local y regional, consolidándose como una voz respetada en los debates más importantes de La Guajira.
A la ceremonia también asistió la directora regional del Sena, Linda Trump, quien llegó acompañada de su esposo, el compositor Rafael Manjarrez. Ambos resaltaron la calidad humana y la trayectoria pública del exrepresentante, recordándolo como un hombre íntegro, respetuoso y cercano a las causas comunitarias.
Familia y líderes evocaron su legado con palabras
Los hijos, hermanos y demás familiares de Marcos Iguarán también tuvieron su espacio para honrar su memoria. Lo describieron como un padre ejemplar, un hermano solidario, un consejero oportuno y un abuelo amoroso. Cada intervención sumó un matiz distinto que, en conjunto, dibujó el retrato íntimo de un hombre que dejó huella dentro y fuera del ámbito político.
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La secretaría de la Cámara de Representantes envió una moción póstuma en la que exaltó las virtudes, capacidades y servicios que Iguarán brindó al país desde la curul que ocupó. Este gesto institucional reforzó el impacto nacional de su trayectoria.
Uno de los momentos más sensibles de la jornada lo protagonizó su nieta, Valeria Iguarán Maya, quien, sin discursos elaborados, dejó salir una frase breve pero contundente: “Yo amo a mi abuelo Marcos”. Sus palabras desarmaron al público y llenaron el salón de aplausos, recordando que el legado también se mide en el cariño que queda en la familia.
El exalcalde Mohamad Dasuki destacó el papel de Iguarán en el fortalecimiento del Régimen Especial Aduanero y su defensa del comercio local, subrayando que su gestión contribuyó a dinamizar la economía y abrir oportunidades para la región.
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Por su parte, el concejal Juan Mario Guerrero, ponente del proyecto que permitió nombrar el recinto, recordó que Marcos empezó su liderazgo desde muy joven y lo consolidó con experiencia y resultados. Fue concejal y diputado en dos periodos, y posteriormente representante a la Cámara, cargos desde los que promovió debates y decisiones clave para el departamento.
