Uno de los consagrados juristas de La Guajira, acaba de iniciar un proceso administrativo con el objeto de conseguir ante los estrados judiciales, que la nación reasuma el dominio, manejo y responsabilidad de la carretera que comunica a la capital Riohacha, con el corregimiento Cuestecitas en Albania, la cual le fue trasferida a La Guajira en 1995 mediante un convenio donde el departamento se hizo cargo de los altos costos que genera el mantenimiento de esa vía.
Luis Eduardo Acosta, el abogado que piensa devolver por medios jurídicos la responsabilidad de la vía a la Nación.
Fuentes consultadas en el ámbito político, dijeron que en aquella oportunidad, por alguna circunstancia, el entonces gobernador aceptó complacido, quizás porque había mucho dinero de las regalías directas a los productores, asumir ese reto, pero una vez se acabó la opulencia financiera con la que se le pagaba a una empresa con la que se contrató el mantenimiento, comenzó lo que sería el deterioro progresivo de la carretera, atizado por el constante paso de millares de tractomulas cargadas de carbón con peso que en muchas ocasiones sobrepasaban lo que puede resistir una de las vías con diseño y construcción adecuado.
Esas empresas aprovecharon que no había peaje para mantenimiento y tampoco dispusieron de presupuestos para un adecuado mantenimiento y ante esa circunstancia, la carretera fue convertida en una colcha de retazos de asfalto donde cada mes había tragedias viales con pérdidas humanas.
En la actualidad se está desarrollando una reconstrucción de la carretera que tiene más de 40 kilómetros de largo, pero al parecer los dineros presupuestos y dispuestos por el Gobierno nacional para la obra, no alcanzan y la conclusión de la obra se encuentra en ‘veremos’.
Ha sido en este momento, donde el jurista Luis Eduardo Acosta Medina ha presentado inicialmente un derecho de petición donde le solicita al ministerio de Transporte, Instituto de Vías, Findeter y gobernación de La Guajira, que estos de común acuerdo procedan a dar por terminado el convenio suscrito en 1995 entre La Guajira y esas entidades que transfirieron la vía, pero con la promesa de que periódicamente le estarían transfiriendo los recursos necesarios y suficientes para el mantenimiento de la carretera en mención.
Esa parte del convenio se ha cumplido muy parcialmente y ahora dispusieron de un dinero que al parecer es insuficiente o el contratista no hizo la mejor ejecución del mismo.
El abogado Acosta Medina dijo a esta redacción que en la eventualidad que las partes no se pongan de acuerdo y tomen la decisión de darle final al convenio, entonces de procederá con una acción popular firmada por todas las personas posibles en la que se le pedirá que la nación asuma la responsabilidad de la operación vial y sufragar los costos del mantenimiento del importante tramo vial.
El abogado indicó que no hay problemas con el sustento jurídico para la solicitud, pues no hay dudas que se trata de una carretera nacional que intercomunica a dos capitales de departamento como son Riohacha y Valledupar, tal como lo establece la ley para que sea administrada y mantenida por el Gobierno nacional. Además, el abogado dice con un tratamiento eufemístico, que se trata de un convenio que se efectuó de una manera defectuosa donde le dieron al departamento una carga que no podía soportar más adelante.